El nombre de pila de una persona es relevante. Si no lo fuera nos daría lo mismo llamarnos uno a otro por el RUN. “Hola, soy 12.376.983-K, ¿cómo te llamas?”, “Mis amigos me dicen guión8, pero mi nombre completo 13.576.389-8”. Claramente el RUN es menos sexy que la gracia individual. Y esto es porque quiéralo o no el nombre es más que un símbolo de referencia personal. Es su tarjeta de presentación, le acerca – correcta o incorrectamente – a su interlocutor sobre su género, su origen social, su parentesco con otros conocidos y la bondad o maldad de sus padres, entre otras cosas.
Más aún, si el nombre no fuera importante, no existirían esas infinitas (y muchas veces detestables) variantes de nombres que la gente ocupa como identidad cibernética. Si en el ciberespacio podemos elegir nuestra tarjeta de presentación, lo hacemos porque (nos) importa. Sin embargo, en el espacio de interacción físico, el Registro Civil y la coerción social nos prohíbe situarnos en el plano de la elección: somos y seremos ante nuestro entorno inevitablemente lo que nuestros padres quisieron que seamos.
Para algunos el nombre es más que una tarjeta de presentación pues da origen a un determinismo cognitivo-emocional digno de esas artes esotéricas de infinitas nomenclaturas y orientaciones. Así, por ejemplo y según algunos, por decisión parental soy y seré irremediablemente “idealista, reflexivo y creativo. Cuando entra en confianza es sociable y ameno. Cuida su aspecto exterior y le gusta saber todo lo que pasa a su alrededor” y según otros estoy destinado a ser una persona tal que “su alegría de vivir va unida a su sentido de la trascendencia de la vida cotidiana. Puede resultar una persona extravagante debido a su presuntuosidad unida a la exageración. La generosidad no está alejada de sus tratos económicos cuando se respeta su libertad de administración. Su deseo de imponer sus ambiciones le hace ir lento pero seguro en la consecución de sus objetivos.”
Sea por su determinismo absoluto, por su relativa importancia o por simple curiosidad vale la pena conocer la distribución de los nombres de pila en una población. Las variaciones temporales en esta distribución pueden dar indicios del traspaso cultural de las élites a las plebes, del arrastre de íconos populares o de la crueldad de ciertos padres. También da pie para dar la lata con curiosidades que no son sino generalizables al caso desde el cual se extrae la anécdota.
En función de lo anterior, procedo a darles un pequeño abanico de curiosidades en la distribución de los nombres en una de las infinitas sub-poblaciones de nuestro país en un año muy cercano al que acontece actualmente.
Primero, la ficha metodológica que por cuestiones de rigurosidad profesional debo mencionar:
- Origen de los datos: confidencial pero real (les aseguro, como verán luego, que mi creatividad no supera la de muchos, muchos padres)
- Tamaño de la muestra: muy grande
- Representatividad: ninguna
- Nota metodológica: para evitar complicaciones he evitado el análisis de los nombres compuestos. Solo muestro los primeros nombres que los sujetos que fueron registrados mencionaron como tal.
- Supuesto metodológico: los individuos responden honestamente y los digitadores transcriben adecuadamente
Procedo, pues, a dar la lata con datos respecto de nombres de estos chilenos**.
Los top ten: acaparan el 18,98% de las preferencias de los padres de esta muestra: María (20897), Daniela (11277), Carolina (11124), Juan (10431), Cristián (9109), Felipe (9078), José (9730), Luis (7814), Francisco (7812) y Carlos (7776).
Las top five inmigrantes: Karen (4688), Katherine (4051), Nicole (3453), Elizabeth (2566) y Evelyn (2407).
Los top five inmigrantes: Jonathan (2732), Christian (1575), Alex (1243), Christopher (781) y Michael (766).
Los originales: 9117 miembros de esta compilación (1,55%) tienen un nombre único en este registro. Así es, aunque usted no lo crea solo hay un Cayetano, un Serafín, un Januario, aunque figuren dos Temístocles, dos Olegarios y dos Segisfredos.
La creatividad se concentra en las mujeres: por cada diez mil mujeres se encuentran 337 nombres distintos, por cada diez mil hombres se encuentran solo 178.
Los promedios: el nombre promedio tiene una prevalencia de 6.5 ocurrencias por cada cien mil personas. Es el caso de Johann, Juanita, Lissett, Lucila, Piera, Rony y Vinka.
Datos de interés mínimo y que solo sirven para abultar el anecdotario personal:
- Hay 22 personas que se hacen llamar Demián.
- Conté 44 formas de escribir Diane (como en inglés) o Diana (también como en inglés) entre las cuales se encuentran, claro, Diane, Diana, y Dahiana, Daiane, Daiyana, Dayane, Dyanna y Dyanne.
- Figuran entre nosotros personajes ilustres, a quienes les debemos nuestra herencia republicana: Voltaire (4), Robespierre (3) y Danton (2) – ¡quién los viera juntos!; y la tradición científica y filosófica: Arquímedes (3), Aristóteles (2) y Sócrates (1).
- Podemos armar una pichanga ideológica entre Marx (3), Lenin (19), Sandino (1) y Gorky (3), por un lado, y Washington (37), Jefferson (9), Lincoln (1), Roosevelt (3) y Nixon (5), por el otro, con Ramsés (1) como árbitro.
- La realeza también está presente con Rainiero (12) y LadyDi (1),
- Y también la producción cultural a través de Disney (1), Verne (1) y Sting (1).
- Figuran también encarnaciones ficticias como Hamlet (1), Merlín (1), Karenina (7), Nikita (2), Aladino (12), Sancho (1), Rocky (3), Dino (14), y Mafalda (4); y
- Deidades como Zeus (1) y Apolo (5);
- También tenemos embajadores terrestres de Bélgica (32), África (9), Francia (139), Alaska (1), Roma (2), Venecia (5), Elqui (1), Australia (2), América (90) , Philadelphia (2), Pennsylvania (1), Níger (2), Jerusalem (1), Albania (1), Wellington (1), Bruselas (1), Sídney (6), España (1), Irán (3), Italia (12), Luisiana (1), Kenya (4) e Ibiza (1);
- Embajadores extraterrestres que vienen a nosotros desde Urano (1), Venus (3), Luna (90), Sol (30), Orión (1) y Andrómeda (1);
- Hijos o nietos corporativos de Jesmarina (sic) (1), Sony (4), Nissan (1), Levis (1), Nike (2), Michelin (1), Belekis (sic) (5), Brooks (1), Chanel (1), Rubinstein (2), Maybelline (5), Hilton (1), Iberia (1) y Dolca (1); y
- Deseos de 'buenaventura' de parte de los padres a sus hijos pues no me explico por qué otra razón los registraron bajo Próspero (1), Prosperina (6), Odisea (1), Modesto (2), Afrodita (1), Dulce (2) y Emperatriz (4).
Así todo me despido acompañado de Sayonara (3), esperando no caer en el Olvido (1) y deseándoles mucho Éxito (1).
Postdata: a quien se sienta interpelado y entusiasmado por lo anterior le sugiero visitar el Museo de la Creatividad Onomástica Nacional, ubicado en las dependencias del Cementerio Municipal de Lolol (VI Región del Libertador Bernardo O’Higgins).
**Las paréntesis indican el número de ocurrencias
14 comentarios:
Estimado Señor que Latea:
Impresionante recuento de nombres ha dejado usted acá registrado.
Lo que más que intriga es de dónde demonios saca usted semejantes datos... o cómo se le ocurre buscarlos.
Y por supuesto, cómo tiene tanto tiempo para recopilarlos.
Una soberana lata, por cierto.
No puedo dejar pasar esta oportunidad sin hacer mención a la fundamental participación de los empleados del Registro Civil, quienes se encargan de inscribir a los recién nacidos, escribiendo en oportunidades los nombres como mejor les suenan.
La anécdota de un cercano:
Su padre lo fue a inscribir al registro civil y le preguntaron:
-¿Cómo le quiere poner a su hijo?"
- Pedro
- ¿Pedro qué?
- Pedro solo.
Y así se llama... Pedro Solo Rojas Reyes
(Los nombres y apellidos han sido cambiados para proteger la identidad de los involucrados)
Esta es una historia verídica.
Mis respetos.
Montt
hace usté que me atragante con mi café y mi medialuna matutina.
El post de hoy no solo demuestra su gran afición por recopilar dato (de lo que me había dado cuenta en su post sobre los colegios), sino que es además una persona metódica y con amplios conocimientos en análisis de datos (lo que me parece una lata atroz, así que lo felicito)
Esta vez me abstendré de hacer un aporte. Todas las anécdotas que me sé son de oídas y no puedo dar fe de su veracidad. Para qué manchar tan pulcro trabajo.
Mis respetos.
Sabía Ud. señor que da la lata que en Perú casi nadie se llama Patricio en rechazo a Patricio Lynch , líder de la ocupación de Lima durante la guerra del pacífico y por lo tanto responsable del enorme y vergonzoso botín de guerra que incluso incluyó un puente de fierro completo. Recientemente se acaban de devolver muchos libros de un valor incalculable y que estaban desde entonces guardados en las bóvedas de la Biblioteca Nacional.
Moñi
Ale,
Fonéticamente Solo no es un mal segundo nombre. No nos olvidemos a Hans.
Prefiero Solo a Olvido, o al popular Soledad.
...
Fran,
Me es un gusto saber de sus complicaciones alimenticias. Espero que no lo haga frente a su(s) retoño(s).
Por favor, traiga los cuentos a colación (preocúpese eso sí de masticar bien antes). El rigor metodológico nos exige, eso sí, explicitar nuestros supuestos y fuente de los datos.
...
Moñi,
Extraño nombre el suyo, le aseguro que usted no forma parte de mis datos. Interesante dato el suyo; habría que ver cómo le está yendo a Marlene y a Ricarte en el rating onomástico nacional.
Sr. Montt, no puedo negar que en la medida que leía me iba acordando de distintas historias de nombres, para mi la mejor es la siguiente, espero se entienda:
A una amiga, asistente social, le toco visitar una casa y llenar las fichas correspondientes con los nombres de los integrantes de la familia, en los cuales figuraban:
- Maria Pérez
- Javier Pérez
. (léase en español, con cada una de sus letras) Onedollar Pérez
Mi querida amiga quedo sorprendida con el nombre y supuso que era de origen indígena, por lo que pregunto a la madre de nuestra querida Onedollar la procedencia de este y ella explico “es que yo trabaje en la casa de unos gringos y tenían unos billetes tan re lindos que decían ONEDOLLAR, así que cuando nació mi cabra así le puse.”
(Espero que escrito se haya entendido)
Tan tan
Don Latero, sí que tiene usted tiempo para recopilar datos.
Le (no) aporto con un nombre que se escapó a sus embajadores, y que llevaba alguien que conocí personalmente: Polonia.
Otro, que no sé cómo clasificar: Dariolethy. Así, tal cual.
Saludos
¿Ve como usté va marcando la pauta del fin de semana?
Ayer, estando en un supermercado de la zona oriente, se escuchó por alto parlante: "Al señor Robenspierre Cárdenas, favor acercarse al mesón de información." Tuve que anotarlo para poder comentarlo.
Me consta. Es un dato duro.
Don Latero, ¿cómo va su experimento? Manténganos al tanto pues. ¿Cuántos son los califas defraudados a estas alturas?
Fran, algo de cierto tiene la manida frase de "la realidad supera a la ficción". Yo, de un tiempo a esta parte, llevo conmigo un lápiz y una libreta de bolsillo. Si viera la de anotaciones que tiene...
Oiga, Sr. Que no Aporta..
espero que todas sus anotaciones vean la luz pronto, mire que tiene al público abandonado (he recibido muchos comentarios al respecto, oiga)
Montt: por el contador me doy cuenta que TANTO éxito no ha tenido su experimento. Vuelva a lo suyo más mejor.
Señor Que Latea:
¿Cómo le ha ido con su experimento?
¿Han aumentado las visitas desde que incluyó pornografía verbal en su blog?
Debería permitir los comentarios en las entradas de los experimentos; quizás lleguen buenas sugerencias y hasta alguna propuesta indecente, ¿cómo sabe...?
Mis respetos
Mi vida en 20 kgs.,
Notable, además que pronunciando la elle el nombre en realidad tiene un encanto, como Ollanta. Hay otras versiones de ese mismo fenómeno para las cuales no tengo evidencia empírica. Dicen de un Madeinusa que anda por ahí.
...
Señor que no aporta,
Soy digno merecedor del calificativo Don? Tendremos que encontrar un escudo de armas para hacer gala del título.
Respecto de Dariolethy, no figura en mis registros, pero sí una Deidyland.
...
Fran,
¿Ve usted que esto es verdad? Seré bueno para hablar tonteras, pero no ando vendiendo mulas... Bienvenida sea usted al mundo del goce que produce la constatación empírica de las hipótesis.
Sigo esperando la colación.
...
Señor que no aporta y expectante concurrencia,
Los resultados del experimento no son inmediatos porque Google no detecta estos cambios inmediatamente. Sí les puedo contar que han entrado personas en busca de información del Farmland College, de "Bideos de Zalo Reyes" y algún fanático que busca información del grande Scaramelli.
...
Ale,
No puse comentarios para no desviar la atención de materias tanto más importantes como es el análisis onomástico. Sin embargo voy a considerar su propuesta. La medito esta noche y le comento mañana los resultados de mi sesudo análisis de costo beneficio de otorgarle oportunidad a comentar en ese espacio. Necesito tiempo y al inspiración de la almohada para decidir.
Y no hay que olvidar, estimado Montt, a los nombres de pila de los porteños. Recuerdo en especial a 'Usnavy' bautizado en honor a un portaviones estadounidense que atracó en Valparaíso.
Por favor denos la lata con un informe estadístico que recopile los resultados más relevantes de su bien intencionado experimento.
A.
Yo conoci a un muchacho llamado Lenin Hitler Mamani, era un tipo bien tranquilo.
y no se olviden de Pepe Pedro Pepe Perez, hijo de tartamudo.
Señor que latea:
Interesante lo que uno encuentra en google cuando el ego se une al ocio...
Y ya que estoy aquí, confirmo que aunque no conozco el nombre Dariolethy... seguramente soy la segunda Deidyland nombrada en esta entrada...
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